Trucaps es un ejemplo de cómo una idea loca puede ser rentable
si se le añade un poco de trabajo e ilusión
Carmen Truyols, una médico especialista en anestesiología y su hermana Raquel, ingeniera de caminos en paro, pusieron en marcha una idea de negocio en 2013, casi como un divertimento. Se trataba de vender gorros personalizados para quirófano a través de una web. La iniciativa surgió en uno de los viajes de Carmen a Asia, donde le confeccionaban gorros a su gusto que regalaba a sus compañeros cuando volvía a España.
Los gorros con estampados coloridos y simpáticos eran un éxito y algunos compañeros encontraron una web en EEUU donde comprarlos. Fue entonces cuando Carmen pensó que los gorros podían ser una idea de negocio. Un mes de papeleos despúes y 1.600 euros de inversión, 800 por cada socia y hermana, pusieron en marcha Trucaps, la tienda online de gorros personalizados. El éxito no fue inmediato pero poco a poco han ido haciéndose un hueco en el mercado y ya son un equipo de 5 personas que trabajan diseñando y fabricando gorros para personal sanitario en su mayor parte. Concretamente un 90%, aunque también los usan cocineros, trabajadores de fábricas, odontólogos o cocineros.
Las impulsoras de este negocio son dos hermanas: Carmen Truyols (izquierda), y Raquel Truyols (derecha). Carmen tiene 33 años, es médico especialista en Anestesiología y Reanimación, y Raquel, de 44 años, es Ingeniera de Caminos y Puertos. La idea surgió en un contexto complicado. Carmen acababa de tener su primer hijo, y su hermana Raquel fue despedida durante el embarazo. Solo se oían malas noticias de la crisis… Sintieron que era el momento de ponerse las pilas y emprender, había que hacer algo para cambiar la situación…
Carmen usaba gorro de quirófano diariamente, más de 8 horas diarias. Sabía que era un producto demandado y sin oferta en España. En alguna ocasión había traido varios modelos de sus viajes por Asia. En países como Vietnam era común que te confeccionaran ropa, y ella había encargado varios modelos de gorros, los habia metido en la maleta y los habia repartido entre sus amigos como recuerdo de su viaje: cirujanos, enfermeros, anestesistas… siempre le pedían que les trajera más…
En ese momento en España se vendían gorros de quirófano, pero como algo artesanal. Era muy común ver a gente con gorros fabricados por una amiga, su madre, incluso empezaban a venderse en algunos blogs y facebook, pero de una manera poco seria. Ellas decidieron que Trucaps sería todo lo contrario. El que lleva uno de sus gorros ha pagado impuestos, ha hecho un pedido en una web, ha recibido una factura y tiene un producto de calidad made in Spain.
Raquel desarrolló la idea con rapidez, se hizo una especialista en costes, telas, compras e impuestos. En menos de un mes tenían un proyecto real, montar un eccomerce. Comenzaron a pensar nombre, y dado que querían resaltar su apellido, a Raquel se le ocurrió que el inicio de Truyols encajaba a la perfección con la palabra inglesa “caps”, que es el término que se usa para los gorros de los trabajadores. Así nació Trucaps.
El proceso para montar la tienda fue bastante fácil. Partieron de una web sencilla, una plantilla en wordpress. Necesitaban ser capaces de manejar ellas mismas la web, dado que sería muy dinamica y tenían claro que habría que actualizar los productos muy a menudo. Llamaron a varios amigos, un informático que les ayudó con la web, una fotógrafa que hizo unas primeras fotos de la colección, y lo más importante, una costurera que cosiera los gorros y que se involucrara en el proyecto. Todo el mundo confió en ellas, aunque no tenían nada más que una idea y mucha ilusión. Pero fue suficiente para que todo el mundo les ayudara.
Solo venden por internet, y no van a cambiar ese concepto por ahora. “Nos parece que el eccomerce es el futuro”, apunta Carmen. Tienen claro que, cuando tienes un negocio pequeño, internet te da la posibilidad de llevarlo a cabo generando un amplio público y con bajos costes. Como nos explica la co-fundadora de la empresa, “en nuestro caso seria imposible pagar un local en una zona comercial con un producto de 10 euros y un micronicho de mercado. Un eccomerce es la fórmula perfecta para un producto como el nuestro“. Pueden vender gorros por toda España, incluyendo las islas, sin tener que moverse de casa. Seria imposible tener tiendas para dar cobertura a tanta gente, da igual lo lejos de ellas que se encuentren sus clientes, en 3 dias pueden llevar uno de sus gorros.
Todos los gorros de Trucaps han sido creados y producidos por ellas. Eligen las telas, bieses, modelos, empaquetado… hasta las etiquetas con su logo. No hay nada en la web que no haya salido de las reuniones del equipo creativo, y están muy orgullosas de ello. Nunca compran nada a terceros que no sea materia prima. Es más, cuando alguien nos copia, sé perfectamente si es un producto nuestro o no, solo con verlo pasar, nos apunta Carmen Truyols.
Partieron de 1.600 euros (800 euros de cada hermana). Pensaban que era una cantidad que podían perder sin que les costara un enfado familiar. Con aquel dinero consiguieron pagar a una fotógrafa, darle un adelanto a un informático para que les ayudara con la web y comprar medio metro de 10 telas diferentes. Sacaron 10 modelos al mercado y la primera coleccion se vendió en un mes. El dinero obtenido lo reinvirtieron comprando dos metros de tela y sacando modelos nuevos. Así varias veces hasta llegar a donde están hoy. El primer año recuperaron la inversión y destinaron todas las ganancias a crecer y mejorar la web. Poco a poco han ido generando varios “mini sueldos Trucaps”, como los llama Raquel, que sirven de apoyo a la profesional, dado que actualmente no se dedican al 100%.
Han llegado a coser 700 gorros en un mes. Y podríamos hacer más, nos dice Carmen. Cuando tienen pedidos importantes contratan una segunda costurera y alguien para empaquetado. El resto del tiempo se va produciendo diariamente, según se vende en la web. Los precios de los gorros parten de 10,90 euros con IVA, pero siempre tienen ofertas, sorteos para los seguidores de Facebook. Desde el principio teniamos muy claro una cosa, queriamos un producto barato, nos dice Carmen. Según nos cuenta la co-fundadora de la marca, el cliente Trucaps es joven, de entre 18 y 50 años, español y del área de la salud. Gente con una estética cuidada, elegante, que prefiere pagar un poco más por un producto de calidad. Tienen pedidos de América del Sur, pero la mayoria son españoles.
El cliente Trucaps es joven, de entre 18 y 50 años, español y del área de la salud
“Actualmente producimos unos 1.500 gorros al año pero queremos seguir creciendo y contratando a más gente, internacionalizar el producto y evitar que nos copien”, nos explica Carmen Truyols. Han llegado a copiar sus modelos, la web, y hasta el nombre, pero parece que no supone un gran problema para las hermanas Truyols. Según Carmen, esto es un daño colateral. Si uno tiene éxito, rápidamente surgen personas que se ven capaces de hacer lo mismo. “Simplemente tenemos que seguir demostrando que somos originales y auténticas, ahí reside el éxito de Trucaps”, apunta la co-fundadora de la marca.
Para Carmen, el objetivo es llegar a trabajar a un quirófano y verlo lleno de Trucaps. Dejar de estar en un ambiente sobrio y frío que genera miedo al paciente. Entrar en una sala de operaciones llena de color, con flores, animales y lunares en las cabezas, de esas que hacen pensar en algo que no sea que te van a operar. El miedo en el quirófano debe ser combatido de algún modo, y el mío personal es este, nos explica.