Teletrabajo. Todas las claves para trabajar desde casa

El teletrabajo se va extendiendo cada vez más en las empresas españolas, pero aunque parezca que son todo ventajas, adaptarse al cambio que supone no siempre es fácil. Por este motivo comentaremos algunas recomendaciones para que tu rendimiento no se vea afectado.

Cada vez más las empresas buscan fórmulas para mejorar la satisfacción y calidad de vida de sus empleados con el fin de que estos sean lo más productivos posible. En este sentido dentro de las políticas de Recursos Humanos y con la aplicación de nuevos conceptos como el salario emocional, surgen iniciativas de otras opciones laborales como puede ser el teletrabajo o el smartworking.   

El 40% de los empleos en las empresas españolas se puede desempeñar desde casa

Aunque podamos pensar que el teletrabajo implica un compendio de virtudes para el trabajador lo que es cierto es que conlleva un cambio de ambiente laboral, de horario, de condiciones e incluso de método de trabajo. En la mayoría de los casos estos cambios se perciben como positivos por parte del empleado, pero también es cierto que no dejan de ser cambios y por tanto requieren un proceso de adaptación que no siempre es fácil.

Para intentar facilitar la transición si recientemente te has incorporado a un puesto de estas características o simplemente para optimizar tu rendimiento si ya llevas tiempo desempeñando tu labor con este sistema, te proponemos un recorrido por todo lo que conlleva el teletrabajo y algunos consejos para conseguir que tu satisfacción y productividad sean máximas.

¿Qué es el teletrabajo?

Cuando hablamos de teletrabajo hablamos de una forma de desempeño laboral que se realiza sin la necesidad de que el trabajador esté presente físicamente en la empresa durante la mayor parte de su horario laboral. En la mayoría de los casos este trabajo suele realizarse desde casa, aunque también podría realizarse desde cualquier otro lugar. Resulta evidente que el papel de la tecnología es fundamental en esta forma de trabajar.

¿Cuáles son las ventajas del teletrabajo?  

El teletrabajo presenta ventajas tanto para el trabajador que realiza su función desde casa o desde otro lugar fuera de la oficina como para la empresa que facilita la posibilidad de que el empleado puede ejercer su labor de esta manera.

Ventajas para el trabajador

  • Flexibilidad de horarios. Cuando se realiza el teletrabajo normalmente se suele trabajar por objetivos lo cual implica una mayor flexibilidad del trabajador para gestionar su tiempo de trabajo. Siempre y cuando se consigan cumplir los plazos este podría organizar su tiempo como mejor le convenga.
  • Conciliación entre lo laboral y lo familiar. La flexibilidad de horarios a la que hemos hecho referencia en el punto anterior y la capacidad de organizar el tiempo de trabajo según conveniencia permite poder conciliar de una forma mejor la vida personal con las responsabilidades laborales.
  • Flexibilidad geográfica. Cuando se trabaja bajo esta modalidad la limitación la determina el acceso a internet. Teniendo este aspecto cubierto se puede desarrollar el trabajo en el sitio que consideremos oportuno ya sea en casa o fuera de ella.
  • Ahorro en costes y en tiempo. El hecho de no tener que desplazarnos al lugar de trabajo y poder trabajar desde casa nos supone un ahorro en dos aspectos claves: el dinero y el tiempo. Evitamos el gasto que nos supone el desplazamiento, así como también el tiempo que invertimos en él.

Ventajas para las empresas

  • Sube la productividad de los empleados. En la mayoría de casos los trabajadores son más productivos ya que se encuentran más satisfechos y organizan su trabajo en función a sus necesidades y preferencias.
  • Ahorro de costes. El hecho de que algunos miembros de la plantilla trabajen desde casa supone un ahorro tanto en espacio como en recursos dentro de la empresa.
  • Favorece la capacidad de atracción y fidelización de la empresa. Suele ser una medida que permite ser más atractivos a la hora de la captación de talento y de retenerlo una vez captado.

¿Qué inconvenientes tiene el teletrabajo?

Una vez comentadas las ventajas del teletrabajo nos centramos ahora en los inconvenientes y lo haremos de la misma manera que en el apartado anterior tratándolos desde el punto de vista del trabajador y también desde la perspectiva de la empresa.

Inconvenientes para el trabajador

  • En algunas ocasiones el equipo corre a cargo del trabajador. En algunos casos tanto la conexión a internet como los equipos necesarios para realizar el trabajo desde casa son aspectos que el empleado debe cubrir por sus propios medios.
  • Necesidad de habilitar un espacio en casa. El trabajar desde nuestro hogar nos supone adaptar un lugar para tal fin con el objetivo de aprovechar el tiempo de la mejor manera posible.
  • Mayor gasto energético. El consumo de electricidad que se deriva de nuestro desempeño laboral, así como los gastos en climatización para propiciar un ambiente agradable son factores a tener en cuenta que pueden engordar el importe de nuestras facturas.
  • Se reduce el contacto con los compañeros. Es evidente que si estamos fuera del lugar de trabajo nuestro contacto con los compañeros es menor. Esta distancia puede influir en nuestra capacidad de coordinación, trabajo en grupo y también se reducirían todos lo beneficios derivados de la socialización y el ambiente laboral.

Inconvenientes para la empresa

  • Inversión en adaptación de los equipos. Este sistema de trabajo supone que la empresa tenga las infraestructuras y los equipos necesarios para poder llevarlo a cabo de una forma satisfactoria para ambas partes. Adaptarse a esta necesidad supone una inversión por parte de esta.
  • Mayor esfuerzo en organización. La organización del trabajo y la gestión de equipos se hace más complicada cuando nuestra plantilla no se encuentra en el mismo lugar de trabajo. Esta coyuntura supone un mayor esfuerzo para llevar a cabo la gestión y organización de los equipos profesionales.
  • El coste de control de calidad es mayor. Al igual que ocurre con la organización también es más complicado tener un control sobre la efectividad y la calidad del trabajo de nuestros empleados.
  • Se reduce la identificación con la empresa. Estar fuera de la empresa implica que poco a poco el trabajador se vaya alejando del ambiente empresarial de forma que tenga una menor sensación de pertenencia a esta.

¿Qué puedo hacer para aumentar mi rendimiento si trabajo desde casa?

  • Adáptate a ti y a tus circunstancias.  Cuando se trabaja desde casa uno de los principales atractivos es la flexibilidad de horarios y el hecho de poder organizar dicho horario de la forma que nos parezca más oportuna. Para hacer esto de una forma adecuada no podemos perder de vista cuáles son nuestras necesidades, por ejemplo, si tengo un hijo pequeño y tengo que llevarlo y recogerlo del colegio; y adaptar nuestras horas de trabajo a esas necesidades para que no interfieran en nuestras funciones laborales. También es necesario identificar cuáles son los momentos del día en los que nuestra capacidad de rendimiento es mayor y tenerlo en cuenta.
  • Establecer rutinas. Las rutinas nos ayudarán a establecer un hábito de trabajo y que nuestro cuerpo y nuestra mente se acostumbren a trabajar a determinadas horas. En estas rutinas hay que tener contemplados momentos de descanso y de ocio. Las rutinas son importantes, pero hay que tener cuidado de pecar de ser inflexibles y saber adaptar estas rutinas a los imprevistos o las necesidades que nos vayan surgiendo.
  • Cuida el espacio de trabajo. Es necesario tener un espacio específico para desarrollar nuestro trabajo y solo utilizarlo para ello. Esto nos permitirá separar nuestra vida personal de la laboral, en la medida de lo posible. Intenta que tu ambiente de trabajo sea lo más agradable posible: mobiliario adecuado, limpieza, orden, iluminación adecuada y natural, un asiento cómodo, una buena climatización…
  • Aprende a gestionar las interrupciones. Para poder reducir el número de distracciones nos puede ayudar determinar algunos momentos al día para contestar correos, llamadas o mensajes. De esta manera no tendremos estos frentes abiertos continuamente con las consiguientes interrupciones que esto conlleva.
  • Planifica. Ahorra mucho tiempo dedicar unos minutos a planificar las tereas que se van a acometer el día siguiente. Trabajar siguiendo un plan hace las cosas más fáciles. En esa planificación conviene tener en cuenta la prioridad de las tareas y programarlas en función de su importancia ubicando primero siempre las más importantes.
  • Busca alternativas a trabajar en casa. El teletrabajo da la opción de poder trabajar desde cualquier lugar con una conexión a internet y ese es un aspecto que podemos aprovechar. Trabajar siempre en casa es algo que puede llegar a cansarnos. Para evitar esto es recomendable que tengamos algunos sitios a los que podamos ir a trabajar cuando necesitemos un cambio de aires (cafeterías, bibliotecas…)
  • Vive. Este sistema de trabajo nos va a permitir romper las normas de vez en cuando y poder adaptar nuestro trabajo a otras actividades que nos apetezca hacer (comer con unos amigos, tomar un café o incluso ir al cine). La clave es sencilla: “Trabajar para vivir y no vivir para trabajar”