OVO Hábitat es un prototipo de vivienda configurable, eco-sostenible, multifuncional y con un diseño vanguardista. Una apuesta única en España a día de hoy porque se trata una solución completamente disruptiva en un sector tan tradicional como el de la construcción. En palabras de Álvaro Roca, CEO de A3D Additive Printer, la startup valenciana que desarrolla el prototipo, “es una vivienda fabricada con materiales de la más alta calidad, evolucionados para conseguir la mayor eficiencia energética y comodidad, sin dejar a un lado la estética vanguardista”.
Ovo Habitat logra reducir en un 50% la energía que empleamos y en un 30% el consumo de agua, frente a lo necesario en la construcción tradicional.
Álvaro Roca, CEO de A3D Additive Printer
Álvaro y su socio Fernando Moreno, comenzaron los primeros estudios y la formulación de negocio hace unos dos años, aunque previamente habían hecho un trabajo de investigación de una fórmula que ya se utilizaba en países de Europa y Estados Unidos. De este estudio sacaron la conclusión de que esta idea podría ser viable y se pusieron manos a la obra para buscar financiación para conseguir fabricar este prototipo.
Los productos utilizados en su construcción son los mismos que se usan en la construcción tradicional, aunque se utilizados de manera diferente, según apunta Álvaro. Las paredes se elaboran con un hormigón específico para la impresora 3D y el suelo es de resina, aunque en general son viviendas como las que conocemos hoy día. “Su singularidad está fundamentalmente en su diseño innovador y vanguardista”, añade Álvaro.
Es configurable y multifuncional porque se puede adaptar a diferentes usos (hogar, retail, oficina, hotel), y eco-sostenible porque, según la información que nos facilita la empresa, por el tipo de materiales utilizados en su contracción, cuida el impacto sobre el medio ambiente. Su creación se basa en un proceso sostenible que permite reducir los niveles de CO2, el coste energético, el consumo de agua y los residuos de materiales.
“Con la construcción aditiva se reduce en un 75% la huella de CO2”
La unidad mínima consta de 30 metros cuadrados con baños, electrodomésticos, salón y dormitorio cuesta unos 50.000€ y la tecnología de impresión aditiva reduce sustancialmente los tiempos de fabricación. Basta con una semana para tener un OVO Hábitat listo y montado, algo que en construcción tradicional es impensable. “Comparándolo con la construcción tradicional, este sistema permite reducir los costes en más del 30%, los tiempos de ejecución más del 80% y los costes financieros asociados en un 25%”, añade el CEO de A3D Additive Printer.